Don Juan, un amante insaciable, recibe al fin su merecido.
Don Giovanni, con ayuda de su sirviente Leporello, intenta seducir a Donna Anna, para lo cual mata a su indignado padre “El Comendador”. Luego huye del novio de la joven (Don Ottavio) que lo persigue para vengarse. Se encuentra brevemente con una relación anterior (Donna Elvira), a la que elude, dejando a su sirviente para dar las explicaciones. Mientras continua escapando, aparece en medio de una boda de aldeanos en donde seduce a la joven novia, Zerlina hasta llevarla a la alcoba. Zerlina logra huir dando gritos y Don Giovanni es arrinconado por sus enemigos, pero logra nuevamente huir. Don Giovanni intercambia atuendo con Leporello para eludir otra vez a Donna Elvira y concretar un encuentro con su doncella. Pero cuando Donna Elvira ve a Leporello creyéndole Don Giovanni se arroja a sus brazos.
Don Giovanni se enfrenta a la estatua del padre de Donna Anna y lo invita a comer, pero para sorpresa de él y su asistente, El Comendador aparece ante la mesa y con gran estruendo, tras intentar conseguir el arrepentimiento de Don Giovanni, lo arrastra hasta las profundidades.